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En el mundo del rock, donde la resistencia es tan esencial como el ritmo, Tim Commerford, el icónico bajista de Rage Against the Machine, nos da una lección de fuerza y determinación al compartir su lucha contra el cáncer de próstata, una batalla que enfrenta desde hace casi tres años. Con 56 años, Commerford no solo desafía a la enfermedad, sino que transforma la adversidad en motivación: “Tengo cáncer y ya no lloro por ello”.
En una entrevista reciente con The Sound Lab, mientras promocionaba su proyecto actual, 7D7D, Tim abrió su corazón sobre su experiencia: “Me siento bien. Tengo cáncer, pero estoy orgulloso de seguir haciendo música, de desafiarme a mí mismo. Siento que mi vida está llena y eso me hace feliz”. Su actitud, una mezcla de aceptación y lucha, demuestra que el cáncer no define quién es, sino que es un pasajero oscuro al que ha decidido no ceder el control de su vida.
Un guerrero contra el cáncer
Tim describe esta batalla como un maratón, no un sprint. Aunque las preguntas sobre la remisión del cáncer son constantes, él tiene claro que esta enfermedad no desaparece completamente: “Siempre está ahí, como un pasajero oscuro. Nunca dirás: ‘Genial, ya no lo tengo’. Siempre tendrás que enfrentarte a revisiones y al miedo de que regrese”.
Durante los dos primeros años de diagnóstico, el bajista confiesa que no podía hablar del tema sin derrumbarse: “Lloraba cada vez que lo mencionaba. Era más duro que el tratamiento. Pensé que ese sería mi nuevo estado: llorar en cualquier lugar al hablar de ello”. Pero a través del ejercicio, la disciplina y un enfoque mental positivo, encontró la manera de fortalecer tanto su cuerpo como su espíritu: “Me mantengo en forma y eso me ha dado una fuerza enorme. Para un tipo de 56 años con cáncer, siento que estoy en excelente condición física y mental”.
Transformando el dolor en poder
Tim encuentra inspiración incluso en experiencias pasadas. Recordó la vez que recibió un injerto de tendón en su hombro, que resultó ser más fuerte que el original tras la cirugía: “Un amigo me dijo: ‘Puedes trabajar ese hombro un 200% más de lo que lo harías normalmente, y seguirá siendo más fuerte que antes’. Así vivo mi vida ahora. Con cáncer, me desafío física y artísticamente para ser más fuerte cada día”.
Esa filosofía lo ha llevado a convertir el dolor en orgullo: “Poder lidiar con esto y seguir haciendo música es algo de lo que me siento increíblemente orgulloso. He transformado una experiencia negativa en algo que me impulsa a ser mejor”.
El futuro de Rage Against the Machine
Mientras Tim escribe este capítulo de su vida, los rumores sobre el futuro de Rage Against the Machine siguen circulando. A principios de 2024, una publicación en las redes de la banda despertó esperanzas de una posible vuelta a los escenarios. Algunos fans especulan con material grabado durante las últimas presentaciones antes de la lesión de Zack de la Rocha en 2022, que obligó a cancelar su gira. ¿Será esta una nueva etapa para la banda sin Zack o una señal de algo más?
Por ahora, el legado de Commerford sigue intacto. Su ejemplo no solo inspira a quienes luchan contra el cáncer, sino también a todos los que buscan superar las adversidades con el espíritu rebelde que caracteriza al rock.
Tim Commerford no solo sigue tocando el bajo, sino que también le da un nuevo significado a la resiliencia en el rock. Y como buen guerrero, su mensaje resuena alto y claro: seguir desafiándote siempre será el mejor himno.