El grupo cordobés Viva Belgrado ofreció una noche inolvidable en el Kafe Antzokia de Bilbao, consolidando su posición como una de las bandas más innovadoras de la escena musical actual. Inspirados por obras literarias como El libro de las aguas de Eduard Limónov, pero mirando hacia el cielo en su disco Cancionero de los cielos, los andaluces deslumbraron a un público entregado que casi agotó las entradas.
Una noche de intensidad y conexión
El evento comenzó con Bananas, banda guipuzcoana de post-hardcore que prendió los ánimos del público con su energía desbordante. Su capacidad para interactuar, incluso entre la multitud, dejó al recinto vibrante para la llegada de Viva Belgrado.
Cuando los protagonistas subieron al escenario, el ambiente alcanzó otro nivel. Siguiendo su distintiva costumbre de tocar arremolinados cerca del batería, lograron transmitir una sensación íntima y cruda. La voz de Cándido, desgarradora y a menudo sin micrófono, demostraba la potencia de sus letras, cargadas de reflexiones profundas que oscilan entre lo poético, lo político y lo espiritual.
Un repertorio que atraviesa emociones
Canciones como Vernissage y Chéjov y las gaviotas llevaron al público a una montaña rusa de sensaciones, mientras temas como Gemini y Jupiter and Beyond The Infinite exploraron perspectivas del ámbito musical con una intensidad metalera y melódica. La emotiva Elena observando la Osa Mayor y el himno Un tragaluz se destacaron como momentos de piel de gallina.
El cierre fue apoteósico con El Gran Danés y Ravenala, piezas que encapsulan la versatilidad de Viva Belgrado, entre lo psicodélico, el post-rock y lo metalero.
Un fenómeno en ascenso
Cándido agradeció al público, señalando que este había sido su concierto más multitudinario en Euskal Herria, y auguró una progresión que podría llevarlos a escenarios aún mayores en el futuro. Viva Belgrado demostró que su crecimiento no es casualidad, sino el resultado de una propuesta auténtica y un mensaje que cala hondo.
Con una narrativa musical poderosa, Viva Belgrado sigue ganándose un lugar destacado en la música contemporánea, mezclando poesía y energía en una experiencia única que trasciende generaciones.
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