Cuando un artista favorito regresa a los escenarios después de un largo descanso, esperamos que parezca un poco frágil o inseguro. Pero durante los Premios Grammy el domingo por la noche, cuando la cámara se alejó de un primer plano de alguien tocando una guitarra, vimos que era Tracy Chapman, la gran cantante de folk. Parecía feliz y su voz sonaba fuerte.
Fue un buen momento en un mundo en el que las entregas de premios a menudo se sienten desconectadas. Chapman cantó su exitosa canción “Fast Car” en vivo por primera vez en años, con la estrella del country Luke Combs. Sonaban muy bien juntos, y al público le encantó.
Hace 35 años, Chapman cantó “Fast Car” solo en los Premios Grammy.
Lo que hizo especial esta actuación no fue solo el tiempo que había pasado. Era ver a Combs, un músico más joven, admirar a Chapman con respeto. Sabía lo importante que era su canción para tanta gente.
Cantaban juntos, y estaba claro que Combs admiraba a Chapman. Otros músicos del público se pusieron de pie y vitorearon.
A veces, cuando una vieja canción vuelve a ser popular, suena diferente. Pero la versión de Combs de “Fast Car” se mantuvo fiel a la original de Chapman. Es raro que una canción permanezca relevante durante tanto tiempo, pero “Fast Car” lo hizo.
Pero hubo un debate sobre a qué género pertenecía la canción. Combs suele cantar música country, así que cuando a su versión de “Fast Car” le fue bien, hizo que algunas personas se preguntaran si la canción era realmente country. Esto llevó a discusiones sobre la raza y los géneros musicales.
Pero el domingo por la noche, nada de eso importó. Chapman y Combs demostraron que la música puede unir a las personas, sin importar sus diferencias. “Fast Car” es una canción sobre las cosas que todo el mundo quiere: ser feliz, ser amado, ser libre.
