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En una intervención en el popular podcast Broken Record, McKagan recordó un encuentro embarazoso con el genio de “Purple Rain” que dejó una impresión duradera.
McKagan, conocido por su ferviente admiración por Prince, reveló que el legendario músico era uno de sus ídolos, junto con figuras como Iggy Pop y Lemmy Kilmister. Esta devoción no pasó desapercibida cuando McKagan incluyó a Prince entre sus siete bajistas favoritos, subrayando la profunda influencia que el ícono del pop tuvo en su carrera musical.
El encuentro incómodo tuvo lugar durante la gira “Diamonds and Pearls” de Prince en Alemania, donde Guns N’ Roses también estaba programado para tocar en el mismo lugar al día siguiente. Animado por la oportunidad de presenciar el espectáculo de su ídolo, McKagan ingresó al recinto por la parte trasera, aprovechando su estatus como miembro de Guns N’ Roses.
Sin embargo, lo que siguió fue un giro inesperado. McKagan recibió un mensaje de que Prince deseaba hablar con él. Aunque inicialmente emocionado, la emoción pronto se convirtió en ansiedad cuando McKagan se dio cuenta de que había consumido demasiado alcohol. Consciente de su estado, McKagan se vio abrumado por la situación y se sintió incómodo frente a su héroe musical.
Recordando el incidente, McKagan admitió: “Estaba demasiado borracho. Cuando aún estaba bebiendo, me di cuenta de que estaba demasiado borracho”. Ante la presión de estar cara a cara con Prince en una atmósfera íntima, McKagan encontró una salida rápida y se retiró del lugar, escapando de la incómoda situación.
El encuentro, aunque breve, dejó una marca indeleble en la memoria de McKagan, quien reflexionó sobre la experiencia con una mezcla de nostalgia y humor. Esta anécdota ofrece una visión reveladora de las complejidades de conocer a los ídolos y las expectativas que rodean tales encuentros, incluso para las estrellas del rock como Duff McKagan.