Kurt Baker, el príncipe del power pop, hizo vibrar la sala Rocket en Bilbao con su inconfundible estilo y energía arrolladora. Este músico hiperactivo, conocido por su talento compositivo y sus pegajosos estribillos, sigue sumando fans con cada visita a la península. Su último álbum, ‘Rock N’ Roll Club’, demuestra que sigue explorando nuevos estilos sin perder su esencia.
La noche empezó con “Send Me To Mars”, un hard rock que puso en alerta a todos los presentes. Con “I Like Her A Lot”, un tema que no se te despega en todo el día, y “Rock ‘N’ Club”, Baker reivindicó los clásicos garitos de rock. La banda que lo acompañó, con figuras como Jorge Coldan y Juancho López, brilló especialmente en “So Lonely”, recordándonos a The Beatles con sus armonías.
Kurt Baker no dejó de lado su característica juerga, pidiendo “chupitous” y elevando la noche con “Anchors Up” y “Foolish Stuff”, verdaderos himnos del power pop. Aunque no tocó guitarra ni bajo en la mayoría del show, su interpretación fue impecable, especialmente en “Sick of Waiting” y “Used To Think”, donde evocó a The Beach Boys.
El concierto culminó con temas festivos como “Can’t Wait” y “Partied Out”. En los bises, Baker emocionó con su acústica en “In Love Alone” y “She Don’t Wanna Be Alone”, antes de cerrar con potentes versiones de “Bad Boy” y “Cruel To Be Kind”.
Una noche redonda que dejó claro que en los conciertos de Kurt Baker solo se viven cosas buenas. Su rock n’ roll club es una montaña rusa de emociones que ningún fan del punk, power pop o hard rock debería perderse. ¡Inolvidable!
