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Nicko McBrain temía no poder volver a tocar la batería después de sufrir un derrame cerebral.
El baterista de Iron Maiden, de 71 años, fue hospitalizado a principios de este año y admitió que su primer pensamiento fue que no podría cumplir con sus compromisos con la gira de la banda, pero trabajó duro para recuperar su estado físico y resistencia.
Le dijo a la revista Metal Hammer: “Fue muy, muy difícil. Cuando sucedió por primera vez, pensé: ‘Esto es todo, no voy a poder jugar. Tengo una gira dentro de tres meses’.
“Tuve mucho tiempo para reflexionar en el hospital”, continúa. “Mi esposa fue realmente mi bastión de fuerza y aliento y estuvo conmigo en todo momento. Hice muchos ejercicios de fuerza, muchos estiramientos con pesas extrañas que tienen y recuperé mi resistencia”.
Nicko elogió a sus compañeros de banda, en particular al bajista Steve Harris, por su apoyo durante su recuperación.
Dijo: “A lo largo de todo este período de tiempo estuve en contacto con Steve, obviamente con todos los chicos, y tuve una pequeña charla con ellos por teléfono y todos fueron muy, muy alentadores, y ninguno más que Steve. Me dijo: ‘Mira, lo más importante es que te recuperes y trabajes para recuperarte'”.
El baterista sintió que era importante compartir con los fanáticos lo que había sucedido porque esperaba ser un ejemplo positivo. Explicó: “Sentí que merecían saber por qué no estaba dando el 100 por ciento y esa fue mi razón principal”.
“La razón secundaria fue que si puedo ayudar a una persona como ejemplo de mi esfuerzo por mejorar, entonces vale la pena hacerlo, así que fue una especie de doble cosa para mí dejar que los fanáticos lo supieran y ayudar a alguien a decir: ‘Bueno, si Nick puede hacerlo, yo puedo hacerlo. Tuvo 13 semanas de recuperación y terminó haciendo una gira por Europa'”.